Cómo repasar temas de oposiciones: consejos para estudiar y memorizar correctamente

¡Hola Futuros Opositores!

Paula por aquí con una super noticia. Hoy escribe en nuestro blog Elisa Arias, más conocida en Instagram como @Srta_opositora, experta en planificación, gestión de tiempo y productividad para opositores.

Seguramente la conocéis por sus libros para opositores (como “Tengo un sueño y pienso usarlo”) . Pero que sepáis que recientemente ha abierto un canal en youtube, para seguir compartiendo contenido con todos nosotros.

  Antes de comenzar, si te gusta aprender sobre planificación y técnicas de estudio, te recomiendo que veas el curso “Primeros pasos para ser funcionario de prisiones”.

Os dejo con Elisa, que nos ha preparado con todo su cariño un pedazo de artículo: cómo repasar temas de oposiciones de la manera más eficaz:

Cómo estudiar los temas de oposiciones

Las oposiciones o cualquier prueba que requiera una alta exigencia necesitan de un proceso sistemático que sigue una serie de pasos lógicos y ordenados para alcanzar el objetivo final, que no es otro que pasar las pruebas hasta obtener nuestra ansiada plaza.

El abordaje de este proceso de fondo implica un marco de trabajo continuo y constante, el aprendizaje de nuevas habilidades de memorización y de una planificación detallada previa.

Como solía decir un profesor mío de secundaria, ‘cada maestrillo tiene su librillo’. A esta altura de la película deberías tener más o menos implementado un sistema de estudio que te haya estado funcionando hasta ahora. 

Pero si piensas que esos métodos te han ido funcionando a medio gas o no te terminan de convencer, no te preocupes que a lo largo de este post te iré dando trucos y consejos para memorizar mejor y estudiar de una forma más efectiva.

Si has decidido enfrentarte a unas oposiciones debes ser consciente de que te enfrentas a un proyecto a largo plazo y que en él, debes mantener la motivación y la disciplina.

Habrá días en los que te quieras comer los apuntes y otros en los que pensarás que no quieres levantarte ni de la cama. No te preocupes, es normal vivir en una montaña rusa durante el proceso. 

Debes aprender a darte tus tiempos y sobre todo, a establecer un ritmo en el que te sientas cómodo y avances.

Para empezar, tienes que conocer tu temario oficial y las bases de la convocatoria de tu oposición. 

¿Para qué? Para saber qué método o estrategia vas a implementar a la hora de estudiar, porque dependiendo del tipo o tipos de pruebas a las que te enfrentes, deberás darle un enfoque u otro.

Obviamente no es lo mismo hacer un examen tipo test que un examen de desarrollo o uno oral, es por eso que para estudiar los temas de las oposiciones tenemos que saber primero a qué nos enfrentamos.

Una vez sepamos a qué tipo de prueba nos enfrentamos, vamos a hacer la primera toma de contacto con tu temario…y aquí es donde deberías hacerte una serie de preguntas:

¿Cuántos temas son? ¿Cómo son de largos? ¿Cómo son de complicados? ¿Sé algo sobre ellos o son totalmente nuevos para mí? ¿Cómo voy a empezar?

Para exámenes tipo test se utiliza mucho la memoria de reconocimiento. En los exámenes tipo test, la memoria de reconocimiento desempeña un papel fundamental.

Estos exámenes suelen presentar una serie de preguntas con opciones múltiples, donde debes seleccionar la respuesta correcta entre varias opciones. 

Es un tipo de memoria que implica la capacidad de identificar una palabra, un concepto o una imagen que has estudiado de tu temario. 

Es un tipo de memoria más liviana por así decirlo, que sólo requiere de la capacidad de reconocer información que previamente se ha almacenado en la memoria, sin necesidad de recordar los detalles muy específicos. Se trata de un tipo de memoria por familiaridad o por comparación.

Para este tipo de pruebas, abordaremos nuestro temario de forma que entendamos el valor del mensaje que nos enseña y con el grueso importante de la información, desechando la paja o lo que no nos aporta nada.

Es muy importante que para estos exámenes sigas esta serie de pautas:

  1. Lee atentamente tu temario en la primera vuelta para discernir lo que es importante de lo que no, qué lo más importante, cuál es la información más relevante y los datos más significativos.
  2. Subraya todo lo importante a la vez que vas desentrañado tema a tema, esto te facilitará después el siguiente paso.
  3. Esquematiza y resume todo lo que puedas, ya que de ahí vamos a programar los repasos.
  4. Haz muchos simulacros del mismo tipo de prueba al que te vas a enfrentar.

En exámenes de desarrollo o exámenes orales se utiliza más la memoria de recuerdo. 

Este tipo de memoria se refiere a la capacidad de recordar información específica de manera consciente y activa, es decir, de recuperar información de la memoria sin necesidad de pistas externas.

La memoria de recuerdo implica recordar detalles específicos como hechos, eventos, experiencias pasadas, nombres, fechas, conceptos y cualquier otra información que pueda ser expresada con palabras.

En este caso hay que abordar el temario de otra manera: la comprensión profunda de los temas.

Las pautas anteriores te pueden servir, claramente, pero en este tipo de exámenes no vamos a tener la respuesta correcta delante para poder identificarla. Tenemos que ser más exhaustivos a la hora de memorizar, y ello implica un poco más de esfuerzo.

Diciéndote esto no quiero desanimarte ni mucho menos, porque al final acabaré dándote algunas herramientas y recursos adicionales para que te sea más fácil y llevadero. Sobre todo trata de mejorar tu talento desarrollando un tema extenso con sólo la evocación de palabras e ideas clave.

  1. Por cada tema que estudies en profundidad trata de hacer un índice o esquema de todos los puntos que debes mencionar para que no se te olvide nada.
  2. Trata de enlazar un tema con otro similar para añadir contenido importante y de valor al examen.
  3. Cuida la estructura (introducción, desarrollo, detalles y ejemplos), el contenido y la ortografía.
  4. Resuelve muchos supuestos prácticos y exámenes anteriores, esto es lo más efectivo que hay para este tipo de exámenes.

Para repasar el temario de oposiciones y consolidar los conocimientos, has de implementar un plan de estudio bien estructurado, donde el planning de repaso de oposiciones juega un papel crucial.

Puede que estés pensando: se me olvidan los temas de las oposiciones; por eso, es esencial emplear estrategias que te permitan retener la información a largo plazo.

Planificar repasos oposiciones

Y aquí es cuando te quiero hablar de la importancia de los cronogramas. Un cronograma es una herramienta de planificación de tareas en un tiempo determinado. Básicamente consiste en asignar al tiempo de estudio un número determinado de temas. Y aquí se abren dos opciones:

  • Opción A: Sabes cuando es la fecha de tu examen
  • Opción B: No sabes cuando es la fecha de tu examen

Para ambas opciones vamos a calcular un paso previo que a mí me sirvió como orientación para saber en cuánto tiempo podía estudiar la primera vuelta al temario de mis oposiciones.

Cogí el tema que para mí era más difícil de todos y calculé cuánto tiempo tardaba en leer de forma activa una de sus hojas al azar por delante y por detrás, subrayarla y esquematizarla. 

Ese tiempo lo multipliqué por el número de páginas del temario en total y así obtuve el tiempo que necesitaba aproximadamente para dar una primera ronda al temario completo. Ahora bien…después de este paso se abrieron dos opciones más:

  1. El tiempo calculado sobrepasa el tiempo que tengo hasta la fecha del examen.
  2. El tiempo calculado no excede el tiempo que tengo hasta la fecha del examen.

En el primer caso hay que reajustar muy bien el cronograma y priorizar los temas más importantes. Ahora te enseñaré cómo se hace eso.

En el segundo caso no hay problemas, el cronograma se ajusta en función del número de páginas que me toca estudiar cada día, dejando unos márgenes de tiempo que después te explicaré para qué son.

¿Cómo podemos saber cuáles son los temas más importantes de nuestra oposición?

Aquí tendríamos que recurrir a nuestros conocimientos previos, nuestra experiencia y la lógica. Deberías poder distinguir así los temas que son más importantes de los que no lo son. 

Pero si aún así tienes dudas y no estás seguro de la importancia de cada uno, recurre al siguiente paso que es ver cuáles son los temas más recurrentes que han preguntado en exámenes anteriores. 

Se trata de estadística pura. A falta de tiempo para la fecha de tu examen, trata de darles prioridad frente a los menos importantes o menos preguntados en años anteriores.

El cronograma total va a constar de dos fases: la primera corresponde a la vuelta inicial de todo el temario y la segunda fase corresponde a los repasos…te hablaré de los sistemas que existen para abordar las dos fases para que tú elijas el que mejor te convenga.

Volvemos a las dos opciones del principio:

  • Sabemos la fecha del examen. En ese caso vamos a dividir el tiempo en tercios.

Dos tercios (2/3) para la toma de contacto con los apuntes y un tercio (1/3) para los repasos.

Si los 2/3 del tiempo que tenemos están dentro de fecha, perfecto. Hacemos nuestra planificación de tal manera que ocupamos determinado número de horas al día para cada tema, 6 días de la semana, dejando un día para descansar.

Si los cálculos no están dentro del tiempo que disponemos, priorizamos los temas importantes y asignamos la planificación del cronograma. Si luego ves que has ido más deprisa o con más soltura y va sobrando tiempo en el cronograma, iremos metiendo los temas menos importantes.

Una vez acaba la primera toma de contacto, vamos con el tercio de tiempo restante para los repasos.

  • No sabemos la fecha del examen. En ese caso vas a asignar tú una fecha concreta.

¿Para qué? Para que no te pase como dice la Ley de Parkinson: El trabajo se expande hasta llenar el tiempo disponible para su realización. 

Esto significa que independientemente del tiempo que tarde una persona en completar una tarea, ésta utiliza todo el tiempo del que dispone para realizarla. Esto lo que evita básicamente es la procrastinación y la demora en las tareas pendientes.

Una vez que tengas una fecha fijada, debes hacer lo mismo que en la opción 1. Asigna cada tema al tiempo correspondiente en tu cronograma.

Para hacer un cronograma hay miles de herramientas, pero la más cómoda es Google Calendar. Puedes sincronizar los datos del ordenador y del móvil para llevar siempre contigo tu planificación. 

O si te manejas mejor con hojas de cálculo puedes usar éstas. Por favor, ten en cuenta esto que es muy importante: ESTABLECE PLAZOS REALISTAS y gestiona tu tiempo de la manera más práctica y eficiente posible.

Yo estuve un tiempo usando el sistema GTD basado en el método Kanban. GTD corresponde a las siglas en inglés Getting Things Done (haciendo las cosas en español).

Yo lo adapté a mi modo de hacer las cosas. Te cuento cómo lo hice… En un tablero en la pared de mi habitación de estudios hice tres columnas.

En la primera puse “To do”, en la segunda “Doing” y en la tercera puse “Done” y con notas adhesivas iba colocando las tareas pendientes. Primero colocaba las notas en la primera columna, como en stanby o pendientes de iniciar. Una vez iniciadas, se van pasando a la siguiente columna y así hasta que se finalizan.

Estudiar y repasar los temas de oposición por bloques

La frase de “divide y vencerás” toma sentido en este apartado. Para poder abordar un temario completo sin agobios debemos estructurarlo en partes más agrupadas o bloques, que tienen en común la misma temática, es decir, están interrelacionados, tienen contenido común y mantienen una coherencia específica. 

Los bloques así, pueden abordarse de manera integrada facilitando el estudio y maximizando la eficiencia. Te será mucho más fácil de lo que piensas estudiar bloques de temas que abordar los temas por separado.

¿Sistema de vueltas o de arrastre? ¿Qué debo elegir?

Que elijas un sistema u otro va a depender mucho de ti y de lo que te funcione mejor. ¿Te funciona mejor acabar el temario entero y después repasarlo? ¿Te viene mejor ir avanzando mientras repasas sobre la marcha lo que vas estudiando? 

Veamos en profundidad cada uno de estos métodos de repaso.

  • El sistema de vueltas o “Full System” consiste en iniciar los repasos una vez has acabado de estudiar todo el temario completo. Como ya te enseñé antes, se le asigna un tercio del tiempo a estos repasos y esto es simplemente porque necesitas menos tiempo para afianzar y memorizar los conocimientos que has ido adquiriendo a lo largo del estudio del temario.

 Y en ese proceso has podido extraer del bruto de todos los temas las partes más importantes, es decir, el contenido se ha reducido y condensado a lo más significativo. 

El enfoque de este sistema es organizado y secuencial, y en mi opinión es el más eficiente en cuanto tiempo y esfuerzo, pero el más complicado a la hora de luchar contra la curva del olvido, ya que pasa bastante tiempo desde que estudias el primer tema hasta que repasas el primer tema.

  • El sistema de arrastre o “Push System” consiste en ir haciendo los repasos a medida que vas estudiando los temas. En este caso, estudiarías un tema y justo al día siguiente repasarías ese tema antes de empezar con uno nuevo. 

Este sistema está muy bien si tu temario no es muy extenso y el tamaño de los temas es muy similar, ya que, en mi opinión, para seguir un sistema de arrastre el progreso debe ser constante y con una evaluación periódica del avance. 

No es el sistema que más me gusta porque justo al día siguiente es cierto que repasas un tema que está fresco pero al que todavía no se le ha dado el tiempo suficiente como para afianzar la información que contiene.

Ya tú debes escoger el modelo que mejor te venga y mejor se adapte a tus necesidades.

Si prefieres un enfoque más estructurado y secuencial, es posible que te sientas más cómodo con un sistema de vueltas, donde abordas los repasos de cada tema uno por uno en un orden predeterminado. 

Si, por el contrario, prefieres un enfoque más flexible y continuo, un sistema de arrastre puede ser más adecuado, permitiéndote avanzar a tu propio ritmo y adaptarte según sea necesario. 

Si tienes un intervalo de tiempo limitado para prepararte para el examen, un sistema de arrastre puede ser más efectivo, ya que te permite comenzar a estudiar de inmediato y avanzar a medida que dispongas de tiempo.

Sin embargo, si tienes suficiente tiempo antes del examen, un sistema de vueltas puede ser útil para asegurarte de que cubras todo el temario de manera completa y sistemática.

También es importante la memoria auditiva en el proceso de estudio. Repasar en voz alta y utilizar lecturas cortas del temario son prácticas excelentes para activar esta memoria y facilitar el recuerdo durante el examen de tu oposición.

Cómo memorizar temas de oposiciones

Antes mencioné de pasada la curva del olvido. Antes de empezar con este apartado quiero hablarte un poco sobre ella para que entiendas mejor el proceso de memorización.

La curva del olvido es un concepto que inventó un psicólogo alemán llamado Hermann Ebbinghaus a finales del siglo XIX.

Según sus experimentos sobre la memoria humana descubrió que tendemos a olvidar una gran parte de la información que aprendemos relativamente rápido al principio pero se estabiliza si repasamos esa información de manera regular.

La curva del olvido muestra gráficamente este proceso. Se representa como una curva que desciende rápidamente al principio y luego se estabiliza gradualmente a medida que pasa el tiempo. 

Esto significa que si no repasamos o revisamos la información que hemos aprendido, tendemos a olvidarla rápidamente. Pero si hacemos repasos regulares, la curva del olvido se aplana, lo que significa que recordaremos la información durante períodos más largos.

Además de los repasos, existen multitud de herramientas que podemos usar en nuestro beneficio para memorizar gran cantidad de datos, fechas, conceptos y definiciones de los temas de la oposición.

  • Resúmenes y mapas conceptuales
  • Reglas mnemotécnicas
  • Código de colores
  • Método Feynman: la técnica Feynman consiste en explicar los conceptos con nuestras propias palabras, como si se lo explicáramos a alguien más. Este método no solo nos ayuda a repasar un tema sino también a entenderlo profundamente.

Cómo estudiar un tema de oposiciones

Te voy a dar una serie de pasos secuenciales para abordar por primera vez un tema de la oposición:

  1. Busca un lugar cómodo y tranquilo para estudiar. Evita las distracciones, mantén un espacio ordenado y limpio y con buena iluminación.
  2. Empieza con una lectura activa y comprensiva del tema al completo. En primera instancia, si hay algo que no entiendes del tema en esta primera lectura, señálalo o apúntalo aparte para investigar o aclarar eso que no has entendido.
  3. Subraya las partes más importantes, palabras clave, conceptos, definiciones, fechas, ideas…Usa un código de colores para hacerlo más visual.
  4. Haz un resumen o esquema del tema completo. No debería ocuparte más de una hoja por una cara.
  5. Elabora un mapa mental del tema, con la idea principal en el centro y las ideas secundarias alrededor, conectándolas con líneas o flechas.
  6. Auto evalúate. Mide tus progresos y tus avances mediante preguntas y simulacros.
  7. Haz descansos de 5 minutos cada 25 minutos de estudio enfocado (método Pomodoro).

Cómo memorizar y estudiar 25 temas de una oposición

Memorizar es un proceso continuo y constante. Memorizar 25 temas o más de una oposición requiere de tiempo, paciencia y esfuerzo, requiere además de mucha concentración y de motivación por tu parte. 

Agrupando los temas por bloques te va a resultar mucho más sencillo el proceso, no es lo mismo abordar 25 temas por separado que 5 bloques de 5 temas cada uno o 6 bloques de 10 temas. 

Los temas se agrupan por bloques según su contenido como te expliqué antes: debe ser similar o compartir información común y deben estar relacionados de una forma coherente. 

Agrupándolos así van a ser mucho más fáciles de memorizar. Recuerda que todo estudio debe ir acompañado de su repaso correspondiente, elige la forma de hacer los repasos que mejor se adapte a tu forma de estudiar y al tipo de oposición a la que te enfrentas, como te expliqué anteriormente. 

Usa tu talento para poner en marcha las herramientas que te ayuden a memorizar. No todos tenemos la misma capacidad de retención, por eso sírvete de todos los recursos que tengas a tu alcance para ayudarte: dibujos, esquemas, vídeos explicativos, mapas mentales, personas de tu entorno a las que les puedas explicar los temas…

Cómo estudiar 60 temas de oposiciones o más

Si sigues el método anterior podrás memorizar y estudiar 60 temas para una oposición si hace falta, o incluso más.

Recuerda segmentar el temario en bloques temáticos coherentes, por ejemplo dividir los temas en grupos de 10, formando así 6 bloques con afinidades temáticas o metodológicas. Esta estructura no solo simplifica la organización del estudio sino que también mejora la capacidad de hacer conexiones lógicas entre los contenidos.

Los temas agrupados deben compartir elementos en común o enlazarse de manera lógica, y no olvides de nuevo que es fundamental acompañar el estudio con repasos sistemáticos, adaptados a tu estilo de aprendizaje

Se me olvidan los temas oposiciones, ¿qué hago?

Sobre todo no entrar en pánico y perder los nervios. Estoy segura de que todos los conocimientos que has ido adquiriendo a lo largo del proceso de estudio están ahí pero crees que te has quedado en blanco. Y nada más lejos de la realidad.

Te voy a recomendar un sistema muy sencillo y que funciona. Se trata del uso de tarjetas o flashcards. Son pequeñas cartulinas que caben en un sobre en las que puedes esquematizar de forma muy breve y concisa cierta información que es fácil de olvidar, como fechas, definiciones, fórmulas matemáticas, preguntas y respuestas, etc.

El objetivo es llevarlas siempre encima y tenerlas a mano para repasos en los tiempos muertos, en los que vas en el bus, el tren o esperas en la parada, en la sala de espera del médico o en la cola del súper.

Puedes organizarlas por temática y guardarlas en sobre, cajitas o simplemente unidas por un clip. Te prometo que con este truco y los repasos nose te van a olvidar los temas.

Y mi última recomendación con respecto a la memorización e integración de información cuando estudias una oposición es que descanses, que desconectes del estudio al menos un día a la semana, que te alimentes de forma saludable y que por supuesto, hagas deporte.

¿Cómo influyen el descanso y el sueño en el aprendizaje?

Básicamente, el descanso y el sueño ayudan a mantener un rendimiento cognitivo óptimo. Durante los momentos de desconexión y cuando dormimos, permites que tu cerebro se recupere del esfuerzo mental y se procesa y consolida toda la información aprendida durante el día, sobre todo en la fase REM del sueño.

La privación del descanso afecta de manera negativa, así que asegúrate de tener un sueño de calidad.

¿Y el deporte, en qué me ayuda?

El ejercicio físico moderado como caminar, correr, bailar o cualquier ejercicio aeróbico, aumenta el flujo sanguíneo hacia todas las partes del cuerpo, incluida el cerebro, mejorando así el aporte de oxígeno y nutrientes. 

Esto reduce el estrés, la ansiedad, se liberan neurotransmisores y factores de crecimiento que ayudan a la plasticidad neuronal y la formación de nuevas neuronas, es decir, retrasa el deterioro cognitivo.

En resumen, la clave está en organizar pequeñas sesiones de estudio que permitan abordar gran cantidad de información de manera más manejable, evitando sobrecargar nuestra memoria a corto plazo.

Recuerda, la preparación de tu oposición no solo se trata de leer y memorizar, sino de comprender y poder aplicar el conocimiento cuando más lo necesites.

Esperamos que estos consejos te sean de gran ayuda en tu camino hacia convertirte en funcionario de prisiones o cualquier otro objetivo que te hayas propuesto.

Si quieres saber más sobre técnicas y planificación de oposiciones, pincha aquí.

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Elisa Arias

Conocida como Srta Opositora, soy Bióloga con especialización en Análisis Clínicos de la Universidad de Málaga y tengo un máster en Reproducción Humana Asistida por la Universidad de Salamanca.

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